La pandemia del Covid-19 limitó significativamente las actividades de diversos sectores, y la educación no fue la excepción, hubo una transición de las aulas a la virtualidad, situación que generó mucho estrés en los padres, así como en los cuidadores de los más pequeños. Por lo general los niños son muy activos, unos más que otros, especialmente los más pequeños, y por lo tanto necesitan canalizar toda esa energía en actividades educativas e interactivas, además en las aulas tienen la oportunidad de socializar y afianzar su identidad.
El retorno a las clases presenciales conlleva el cumplimiento de un protocolo establecido por las autoridades de educación. En este sentido, la licenciada Rocío Sánchez, directora del Preescolar Jardín de Pekes, explica que este centro educativo ha diseñado una serie de herramientas que responden a la presente necesidad de una higiene más eficaz para prevenir, no sólo contagio por COVID 19, sino cualquier otro virus emergente. “El uso diario de Cavicide , un potente germicida de hospitales ampliamente utilizado en USA, es sólo una de las medidas tomadas dentro de nuestro nuevo protocolo de higiene”, asegura.
Por otro lado asegura que como centro educativo tiene la responsabilidad de informar y educar, tanto a los estudiantes como a los padres y su personal, sobre todos los aspectos a tomar en consideración con relación al Covid-19. “Por lo que comunicar, edificar y reforzar nuestro plan de acción es un trabajo continuo. Los padres firmarán el formulario COMPROMISO DE SALUD , asegurando su planilla de vacunación al día de COVID-19, dice la licenciada Sánchez.
MEDIDAS DE SEGURIDAD
- Antes de abrir las instalaciones del colegio se procede a limpiar el sistema de plomería general y cisterna, desinfección y fumigación del local y limpieza de los sistemas de climatización.
- Se colocan carteles gráficos en todo el plantel con la idea de promover y recordar constantemente las medidas de higiene y prevención. Rutina de entrada que incluye toma de temperatura, limpieza de calzados y lavados de manos así como supervisar la colocación de mascarillas o viseras a los niños que por su edad lo requiera.
- El delicado manejo de envases, mochilas, loncheras y otros elementos externos al colegio es clave para la prevención del contagio en nuestro centro, por lo que se pide a los padres lavar continuamente cada uno de estos. Cabe destacar que el colegio cuenta con áreas debidamente ventiladas y distanciamiento adecuado a la hora de las comidas.
- Disponen del uso general de jabones antibacteriales, gel desinfectante, wipes y papel toallas desechables, así como bandejas desinfectantes para el calzado en las entradas. Señalizaciones en el merendero de espacios disponibles para distanciamiento y en las aulas.
- Área habilitada de aislamiento para casos de emergencias y posibles sospechas de caso.
- Cronograma de limpieza por áreas, así como también limpieza continua de llavines, pasamanos, interruptores de luz, baños, etc.
Según la licenciada Sánchez los niños han asimilado estas medidas de manera natural, ya que siempre ha sido práctica del centro el constante lavado de manos, la desinfección de los muebles y ventilación de las aulas. Gracias a la educación de los padres en casa, los niños identifican, aún a temprana edad, el porqué del uso de las mascarillas, las viseras plásticas, y el desinfectante líquido de manos.
Por otro lado la licenciada Sánchez asegura que los padres se han mostrado receptivos al enviar a sus niños al colegio. La respuesta de los padres ha sido por demás positiva, especialmente porque este centro educativo ha cumplido a cabalidad los protocolos ofrecidos en nuestro manual de procedimientos para este año escolar. El temor es natural, lo hemos manejado con educación y asertividad, ya que los 21 años de trayectoria del colegio nos preceden.
Sobre el Jardín de Pekes
“El Jardín de Pekes nace en diciembre del 1998, como una iniciativa familiar de crear un espacio seguro para nuestros hijos que estaban en edad preescolar en ese entonces. Nuestra experiencia con otros colegios de ese tiempo había sido tan negativa que decidimos emprender un camino que proveyera a nuestros hijos, y de paso, a otros niños, un lugar cálido, familiar, pequeño y alegre donde desarrollar sus capacidades al mismo tiempo que se educaban en valores patrios, morales y artísticos”. Así asegura la licenciada Sánchez.
Su misión es ser un centro de formación líder de formación inicial cristiano que promueva una educación integra y social en pro de una comunidad cristiana llena de temor de Dios, ofreciendo calidad en sus servicios personalizados, comprometiéndose con el crecimiento de su equipo de trabajo, motivándolo a la creatividad y constante preparación y así poder garantizar una estimulación adecuada en los pekes.